Ingredientes
500 g de queso crema (o yogur entero si no tienes requesón)
4 huevos grandes
1 vaso de azúcar pura
1 cucharadita de extracto de vainilla
1/4 taza de harina para todo uso
1/2 taza de crema espesa
Una pizca de sal
Preparación
Precalentar el horno: Precalienta el horno a 180°C (350°F) para asegurarte de que esté a la temperatura adecuada cuando el pastel esté listo.
Preparar la mezcla para el pastel: En un tazón grande, combina el queso crema (o yogur entero), los huevos, el azúcar, el extracto de vainilla, la harina, la crema espesa y una pizca de sal. Usa una batidora eléctrica o un batidor manual para mezclar todo hasta obtener una mezcla suave y bien combinada. El propósito es lograr una mezcla homogénea y libre de grumos.
Preparar una fuente para hornear: Engrasa ligeramente una fuente para hornear de 23 cm con aceite o spray antiadherente. También puedes cubrir el fondo con papel de hornear para facilitar el desmolde.
Verter la mezcla en la fuente: Cuando la masa del pastel esté suave, viértela en la fuente que preparaste. Alisa la superficie con una espátula.
Hornear el pastel: Coloca la fuente en el horno precalentado y hornea durante aproximadamente 5 minutos, o hasta que el pastel esté dorado y firme al tacto. Puede que necesites ajustar el tiempo de horneado dependiendo de tu horno y la altura de la mezcla en la fuente.
Enfriar y servir: Deja que el pastel se enfríe en la fuente durante unos minutos antes de desmoldarlo. Luego, desmolda el pastel y colócalo sobre una rejilla para que se enfríe completamente.
Disfrutar: Sirve el bizcocho de crema sin base a temperatura ambiente o frío. Puedes acompañarlo con frutas frescas, mermelada o una salsa de tu preferencia.